La exposición recoge por 51 imágenes en las que se muestra un recorrido por la trayectoria fotográfica del autor desde finales de los setenta y primeros ochenta hasta la actualidad. En los primeros trabajos de García-Alix, el visitante podrá observar una serie de retratos y autorretratos en el que técnicamente se descubre el paso de 35 milímetros al medio formato (6x6).
La evolución posterior del autor gira hacia mundos más oníricos y de ensoñación, presentes en sus trabajos más recientes. Mundos que son creados y recreados con distintas técnicas fotográficas como la múltiple exposición analógica, el desenfoque o la cámara en movimiento. Además, en la exposición está presente el mundo de la moto que ha acompañado a García-Alix con fuerte presencia durante toda su carrera.